Ambientación, restauración y servicios verticales están entre los
propósitos de dos de las cooperativas no estatales aprobadas en Matanzas, cien
kilómetros al este de la capital de Cuba. Y ahora surge una nueva con similares
objetivos: Arabescos.
El número de agrupaciones
dedicadas a lo mismo se debe en gran medida al deterioro del centro histórico
de la ciudad y la cercanía del polo turístico de Varadero, dos mercados
potenciales para trabajos de muchísima especialización. Las cooperativas no
agropecuarias ponen el mayor acento en aquellas áreas donde la gestión estatal
ha sido menos eficiente.
Tal es justamente el incentivo
de la cooperativa en formación Arabescos, a primera vista sobresaliente por el
prestigio de varios de sus integrantes.
Jesús A. Mederos, artista plástico,
con experiencia en la ambientación citadina en Cuba y Chile, considera que uno
de los objetivos fundamentales es llevar el arte a los espacios públicos y
sensibilizar a los matanceros con esas obras.
Algo similar piensa su colega
Ulises Niebla. “Matanzas está como detenida en el tiempo –abunda- y ya es
tiempo de hacer algo bueno por esta ciudad”.
Ya en el ámbito más formal, la
especialista comercial de la cooperativa, Lis Rosa Suárez comenta que no solo
será la ciudad el punto de mira de Arabescos. En Varadero cualquier institución
que requiera sus servicios será atendida.
La entrega del mural abierto en
las calles Ayllón y Contreras así como trabajos individuales en hoteles del
principal destino de sol y playa del país son las cartas de presentación de Arabescos,
en una urbe donde buena parte de los edificios están en regular o mal estado, y
en que la ejecución de restauraciones no se ha distinguido por la rapidez.
Ercilio Vento, Historiador de la Ciudad y socio de la
cooperativa como restaurador, considera que el surgimiento de estas agrupaciones
pudiera dar un vuelco a la situación de la ciudad si se confía en ellas.
Surgen de hecho con competencia
en un campo donde el resultado de su trabajo estará a la vista de todos, a lo
que responde con seguridad Mederos: “No hay temor a la competencia, si van a
hacer lo mismo que nosotros, pues que lo hagan mejor y así ganamos todos”.
Arabescos tiene en la mira el
Parque de los Chivos y la calle Narvaez, al igual que el apoyo a proyectos
comunitarios que mejoren el bienestar las personas, todos los cuales se
asumirán en cooperación con jóvenes talentos como sucedió en el mural recién
inaugurado, donde trabajaron estudiantes de la escuela de Artes Plásticas.
Por lo pronto, será un nuevo
grupo dedicado a mejorar la imagen de una ciudad necesitada del concurso de sus
pobladores.
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